¡Hola a todos!
En el post de hoy os voy a hablar de los coloretes, seguramente que todos sabéis lo que es y para que sirven pero ¿conocéis sus formas de presentación? Con esto me refiero a los tipos de colorete que hay en el mercado, polvo, crema, líquidos, mousse... A mi personalmente me encantan los multiusos, estos coloretes que puedes usar tanto para labios, como sombra de ojos, iluminar una zona, dar rubor... Y entre los multiusos los que más me gustan son los de textura líquida, me parecen perfectos, aguantan todo el día incluso en verano, resisten el agua y el sudor,puedes usarlos como labial ... vamos un todo en uno :)
La principal misión del colorete es unificar dos fuerzas cromáticas del rostro, los ojos y la boca. Su función es esculpir, suavizar, reavivar o dar un aspecto saludable al rostro, es como si potenciáramos el rubor natural o resaltáramos los rasgos, dando un aspecto de buena cara inmediato.
Dentro de los coloretes, podemos encontrar varias formas cosméticas:
- Crema, barra o mousse: suelen estar formulados a base de ceras y pigmentos semejantes a las barras de labios, son mitad crema, mitad polvos pero sin dar sensación grasa. Suelen llevar en su composición además de talco o mica, dimethicone, cyclopentasiloxane, cyclomethicone estas tres últimas son siliconas. Se pueden aplicar directamente sobre la piel, el maquillaje o los polvos. Estos coloretes suelen valer también para aplicarlos en párpados o labios.
- Líquidos: se elaboran disolviendo un colorante hidrosoluble con etilcelulosa o cualquier resina soluble en alcohol a lo que se le añade un plastificante para obtener una película flexible. Deben tener suficiente viscosidad, ser uniformes y secar rápido, por lo que son un poco difíciles de trabajar, hay que aplicarlos rápidamente para que no se sequen. Su principal compenente suele ser agua y se pueden usar para los labios sin problemas.
- Polvo: son polvos micronizados de tamaño casi imperceptible, suelen llevar en su composición mica, talco, zinc, sílice, algunos además añaden dióxido de titanio (protege de los UV) o aloe barbadensis. Los colorantes que poseen pueden variar entre un 1,5 y un 6% del total de la formulación aumentando si es un color intenso.
Lo importante de un buen colorete es que sea fácil de aplicar, duradero, que tenga buen poder cubriente y que deje un aspecto uniforme en la piel, que no queden “parches”. No hay que tener miedo a usar coloretes muy pigmentados o de colores muy vivos, todo depende de la intensidad con que los apliquemos y del efecto que queramos. Lo ideal para aplicarlos es una brocha de pelo suave pero no excesivamente tupida, las hay redondeadas, biseladas, o están las mofetas que son mis preferidas ya que con ellas coges poco producto así que si quieres más intensidad, solo tienes que aplicar más capas. Otra opción es usar la brocha Yachiyo, no falla, ya os hable de ella en un post anterior. Para los coloretes líquidos o en crema, yo prefiero aplicarlos con los dedos, una vez que le coges el truco es la mejor opción, quedan muy naturales. Mis preferidos son en polvo y los líquidos para el verano, no se mueven ni se van con el calor o el sudor, no marcan los poros y además me gusta usarlos para los labios también. Un truco para aplicarlos mejor es darlos después de la hidratante, no se adiheren tanto a la piel y te dan más tiempo para trabajarlos, yo los suelo poner antes de la base de maquillaje o los polvos, queda muy natural, a veces les pongo un punto de colorete en polvo encima. Los que menos me gustan son en crema, suelen terminar marcando los poros con el paso de las horas pero todo es cuestión del tipo de piel de cada persona y probar. Los hay en tonos mate, con brillos o destellos, personalmente los prefiero mate. Para aplicarlos es muy sencillo, si quieres un rubor, sonríe y aplícate el colorete sobre el pómulo difuminándolo, si quieres marcar los rasgos simplemente súbelo hacia la sien. Ten en cuenta que los tonos claros resaltan y los colores oscuros afinan y dan profundidad al rostro, pero esto ya sería otro tema para comentar en otro post ;)
Y eso es todo, espero que os haya servido esta entrada y que os animéis a probar distintos tipos de coloretes, eso sí, antes de compraros cualquier cosa a ciegas, probarlo. Ya me contaréis la experiencia. Hata el próximo post!
¡Gracias por leerme!
